El primer equipo femenino del Racing Club Portuense finalizó el domingo su participación en la fase regular cayendo por la mínima en el derbi local ante el CD Doña Blanca.
El conjunto dirigido por Andrés Peláez finaliza la competición en quinta posición logrando un total de 13 puntos, fruto de cuatro victorias, un empate en los doce partidos disputados.
Un equipo de recién creación y que le costó comenzar la competición por la limitación de jugadoras, fue poco a poco creciendo y ganando conceptos notando una gran mejoría de juego y resultado con el paso de las semanas y a medida que el curso liguero iba llegando a su fin.
A pesar de finalizar ahora la competición, las Guerreras Racinguistas continuarán los entrenamientos y jugarán algunos amistosos hasta final de la temporada actual de cara a ir mejorando y compactar el bloque que competirá la próxima temporada.
Derrota en el derbi local
El técnico racinguista, Andrés Peláez, manifestó al término del último partido liguero ante el CD Doña Blanca que “ha sido un partido disputado, Al inicio es cierto que estuvimos algo más flojos y el rival tuvo más presencia pero conforme pasaban los minutos íbamos cogiendo mejores sensaciones. El planteamiento era tener el balón, circularlo rápido, llevarlo de banda a banda y atacar a través de un juego combinativo. También teníamos claro que si al recuperar teníamos opciones de salir rápido al contraataque, lo íbamos a hacer”.
Continuó explicando las premisas marcadas a sus jugadoras, “defensivamente propusimos un bloque medio/alto con la intención de robar lo más cerca posible del área rival. Sabíamos todo el espacio que dejábamos a nuestras espaldas y, que el Doña Blanca podía hacernos daño por ahí pero asumimos ese riesgo”.
Andrés se lamentó de que “nos ha faltado, y eso fue lo que le comenté a las jugadoras en el descanso, fue presionar y presionar tras pérdida, tuvimos que estar más vivos e intensos y apretarle a la rival, achicarle el espacio y estar listos para, en el momento oportuno, meter el pie para robar pero en muchas ocasiones les dábamos ese metro de más y eso hizo que tuvieran más tiempo para pensar y para ejecutar”.
Finalizaba diciendo que “pienso que hemos llevado el peso del partido durante la mayoría del tiempo, hemos tenido varias y alguna ocasión de gol más que el rival pero bueno, a veces el fútbol es caprichoso y como en la vida, uno hace o por lo menos lo intenta hacer lo mejor posible pero hay factores que no dependen de uno mismo y eso hace que el resultado final no sea el que realmente se merezca. Pero a pesar de eso y de que la competición haya terminado hay que seguir trabajando, para recoger hay que sembrar primero y no tenemos que desaprovechar ningún día. Todos los días son oportunidades que se nos dan para trabajar, para solucionar los fallos que se han cometido, para reforzar las cosas que hayan salido bien y para continuar con nuestro camino”.
